viernes, 17 de enero de 2014

¡Hasta pronto!

Atrás dejamos dieciocho entradas con la excusa de la asignatura de Educación de Personas Adultas y Mayores. Entradas en las que expresamos nuestra opinión, reflexionamos y cuestionamos una y otra vez nuestras ideas sobre qué es ser una persona adulta o mayor.

A lo largo de todo este camino, hemos aprendido que lejos de ser estas etapas de decaimiento en las diversas habilidades y de disminución, en general, de las capacidades intelectuales (especialmente como se piensa de la adultez tardía) son etapas de consolidación y puesta en práctica de lo aprendido, pero también son, ambas, etapas de aprendizaje, aunque éste se produzca de manera diferente que en edades más tempranas. De esta manera, durante este recorrido hemos intentado nutrirnos de aquellas personas que han compartido con nosotros su experiencia a este respecto en el espacio de la asignatura y, consiguientemente, hemos descubierto que si es importante añadir años a la vida, más aún lo es añadir vida a los años. Con todo ello, esperamos algún día poder volver a retomar este espacio en el que poder volcar nuestras inquietudes y pensamientos.

Por lo tanto, esperamos que esta no sea una despedida para siempre y que en el futuro sigamos realizando entradas relacionadas con estos aspectos, ya que en nuestra futura profesión, sobre todo en la educación social, van a estar muy presentes.

En definitiva, nos gustaría despedir la asignatura como se despide el verano cada año, pero después de un tiempo frío siempre vuelve… por lo que no es una despedida eterna.
¡HASTA PRONTO!



jueves, 26 de diciembre de 2013

Generación Rock.


Generación Rock es un programa de TVE protagonizado por el director musical y cantante Ramón Melendi y el productor artístico José de Castro, en el que participan 15 personas mayores de 68 a 85 años, las cuales han sido elegidas tras pasar varios castings. En el programa, estas personas tienen que superar una serie de retos cantando.

Los quince protagonistas provienen de diferentes lugares: Ceuta, Extremadura, Andalucía, Cuba, Jaén, Madrid… Todos han dejado de lado nietos, ganchillo y dominó para preparar un desafío insólito: cantar ocho temas emblemáticos de la historia del rock. Siendo el objetivo del programa realizar un concierto final ante un numeroso público.

Durante ocho semanas, estarán ensayando y adaptándose a este estilo. Melendi prepara un variado repertorio que incluye temas en inglés y que pone a prueba la paciencia, la memoria y las dotes interpretativas de la banda. Este repertorio incluye a los Rolling Stones, Luz Casal, Rosendo, Alaska o Queen, y culmina con el himno del programa, el tema “Mi Generación”, que Melendi ha compuesto especialmente para la ocasión.

Además los quince protagonistas realizarán diferentes salidas y actividades: como la grabación de un videoclip o una escapada al Festival de la Luz en Galicia o al London Rock Tour.

Durante tres meses, los equipos de Generación Rock han seguido el proceso de aprendizaje de los quince  miembros de la banda y también en su día a día, para mostrar cómo han encajado, ellos y sus familias, un cambio tan radical de rutina. El resultado es más que un programa musical: es una mirada sorprendente, insólita, optimista y tremendamente emocionante de la vitalidad de la tercera edad y una demostración de su capacidad de superación, aprendizaje y talento.

Como todo el mundo sabe: “Los viejos roqueros nunca mueren”.

A continuación dejamos unos enlaces del programa:


viernes, 13 de diciembre de 2013

El aprendizaje a lo largo de la vida.

En la enseñanza básica de esta semana tuvimos la oportunidad de conocer el testimonio de dos compañeras de Educación Social que tras abandonar los estudios, por diferentes circunstancias de sus vidas, decidieron retomarlos hace cuatro años.

Clara es una de ellas.

Clara tiene 44 años y retomó sus estudios a los 40, tras sufrir mobbing en su puesto de trabajo de aquel entonces.

A ella, desde pequeña, le habían dicho que no servía para estudiar. De hecho, nos confiesa que su padre le ayudaba a estudiar y que esa dependencia le hizo no saber estudiar por ella misma, o al menos eso es lo que llegó a pensar.

Hizo un módulo de secretariado, en el que tuvo que emplear dos años más de lo habitual,  y después se matriculó en la carrera de Magisterio, pero vio que esto no la motivaba.

Tras sufrir acoso laboral, Clara decidió dar un cambio a su vida y retomar sus estudios, matriculándose en el módulo de “Animación Sociocultural”. Fue entonces cuando descubrió lo que verdaderamente le gustaba y fue por ello por lo que se animó, tras finalizar dicho módulo, a realizar la carrera de Educación Social. Nos cuenta, además, que desde que está estudiando en la Universidad Pablo de Olavide ha tenido muchas oportunidades para vivir experiencias inolvidables y verdaderamente enriquecedoras (viajó a una aldea de Marruecos, estuvo este verano en EE.UU. durante dos meses formándose en una Unidad de Estancia Diurna…)

Para ella esta experiencia ha sido realmente positiva y nos dice que si algo ha aprendido con los años es que todo aquello que aprendemos puede sernos de gran utilidad en nuestra cotidianeidad. “Nada es inútil de aprender y de ello te das cuenta con los años porque ves que tienes muchos recursos a tu alcance, aunque muchas veces una lo olvide”.

Pero no solo pudimos conocer la experiencia de Clara, también compartió con nosotras su experiencia Victoria, compañera de Educación Social.

Victoria tiene 50 años.

Comenzó con 46 años en la carrera de Educación Social.

Ella trabaja como cocinera y nos transmite que ella realmente ha retomado sus estudios por motivación e inquietud personal por aprender.

Para ella todo lo que aprendemos sirve en nuestra vida.

A nuestras espaldas llevamos una mochila donde guardamos todas aquellas cosas que hemos aprendido a lo largo de los años y que están ahí para utilizarlas cuando nos hagan falta.

Nos comenta Victoria que aunque ella no ha podido participar en ciertas actividades organizadas por la universidad, y en las que Clara sí que ha participado, realmente participa en todo cuanto puede. Bromea con ello diciendo que está “metida en todos los fregaos”. De hecho, ella es la organizadora y administradora del grupo Facebook de los educadores sociales de la Universidad Pablo de Olavide (“Los edusos de la UPO”). Además, fue finalista de los premios Nico, organizados por “Mundo Mayor”, en los que se la galardonó con una estatuilla.

De esta manera, gracias al testimonio de estas dos compañeras, hemos podido ver que realmente para aprender solo hacen falta una serie de ingredientes, como si de una receta se tratara: motivación, inquietud y recursos, combinados con dedicación,  constancia y un poco de organización, además de una dosis de ingenio y creatividad.

Por último, antes de cerrar esta entrada, nos gustaría compartir un vídeo que verdaderamente nos emocionó y que es muy significativo para poder comprender lo explicado.

¡Esperamos que os guste!


sábado, 7 de diciembre de 2013

Nelson Mandela, un adulto mayor ejemplar.

Llegando casi al final de esta asignatura: “La Educación de personas adultas y mayores” queremos relacionar un hecho reciente, la muerte de Nelson Mandela el día 5 de Diciembre de 2013 con todo lo relacionado con las personas mayores que hemos dicho hasta ahora. Además es una forma de hacer homenaje a este personaje tan importante para la humanidad.

Nelson Mandela murió con 95 años tras una vida de lucha por la igualdad de las personas blancas y negras, aplicando métodos de resistencia no violenta. Fue político y abogado y estuvo encarcelado por el Apartheid durante 27 años pero tras su salida de la cárcel siguió luchando por una democracia multirracial para su país y recibió el premio nobel de la paz.

Podemos observar un claro ejemplo de lucha y superación, a media que avanzaba su edad. Sus capacidades físicas quizás se redujeran pero su motivación y actividad nunca se vieron mermadas.

Relacionando esto con la entrada anterior se puede comprobar cómo los estereotipos no se cumplen, ya que Mandela buscaba un cambio radical en la forma de vida de su país, por lo cual sus acciones fueron continuas y creativas. En todo momento, Mandela estaba cercano a su pueblo y aunque sufría algunas enfermedades, sobre todo al final de sus días con una infección pulmonar, siempre disfrutó de lo que hacía ya que veía que su lucha podía cambiar y acabar con el Apartheid que segregaba de forma racial en Sudáfrica.

Con todo esto podemos afirmar que no por ser mayor la persona tiene que quedar en un segundo plano, sin realizar ninguna actividad y esperando a que llegue el final de sus días. De forma contraria hay que impulsar a que las personas mayores aumenten sus contactos y la participación social, y se debe sensibilizar a la sociedad de que no por ser mayor se pueden realizar menos cosas sino que al contrario, hay que hacer frente a esa cultura que nos gobierna y que a partir de cierta edad nos hace inútiles y sin valor.

Te recordaremos siempre.


Entrada voluntaria: Los estereotipos sobre los mayores.

Cambiando nuestra forma de pensar.

Esta entrada va dedicada a desmontar todos aquellos estereotipos que la mayoría de personas tenemos sobre los mayores. Ahí van algunos de ellos:

-Aferrados a sus tradiciones, no les gustan los cambios ni las novedades.
Debemos partir de que todos tenemos un cierto temor al cambio, al no saber que va a ocurrir después. La personalidad de cada uno va a influir en el deseo u oposición al cambio. En contra de este estereotipo podemos destacar que la represión del pasado puede impulsar a muchos mayores hacia ese cambio en su modo de vida, que antes no les estaba permitido. Con los cambios que se producen en la actualidad, muchas de estas personas se motivan y comienzan a participar en actividades que antes no se habían planteado (gimnasia, bailes de salón, pintura…)


-Son más lentos en sus acciones y pensamientos y su creatividad también es menor.
Esto se puede comprobar que no es cierto con los ejemplos claros de muchas de nuestras abuelas, que son muy creativas ya que te hacen un guiso para comer con lo primero que encuentran. Además son capaces de hacer juguetes con tela y toda una gran variedad de utensilios que reutilizan de forma imaginativa. Esto nos demuestra que la experiencia es un grado y el hecho de haber pasado por situaciones difíciles como la postguerra acentúa esa capacidad de creación, al contrario que se suele pensar.

-Disminuye la capacidad de aprendizaje.
La capacidad de aprendizaje no se reduce sino que la forma de aprender de los mayores es diferente, con otros ritmos y técnicas de enseñanza. Además hay que destacar que se adaptan bastante bien a los cambios y esto les puede permitir aumentar la capacidad de innovación; aunque esto último dependerá de la personalidad de cada uno.

-Pueden llegar a ser más irritables, y en ocasiones, difíciles de tratar.
Es cierto que las personas mayores tienden a estar más susceptibles y con continuos cambios de humor, lo cual puede pensarse que es debido a una baja autoestima al ver que sus capacidades se reducen. Sin embargo, lo que ocurre realmente es que todos estos cambios dependerán de la personalidad de cada uno, por lo que una persona que siempre ha sido irritable lo seguirá siendo. Ante esto hay que fomentar los contactos sociales puesto que pueden reducir esos continuos cambios de estado de ánimo.

-Suelen sufrir más enfermedades que les impiden disfrutar y son causa de su jubilación.
Es cierto que las personas mayores tienen enfermedades relacionadas con el deterioro físico, pero esto no les tiene porque impedir disfrutar. De hecho, muchas de estas personas asumen el momento de vida en el que se encuentran y disfrutan plenamente de él, gracias a la experiencia y a toda la trayectoria vital que ya poseen. Por esta razón, la jubilación no viene derivada de sufrir estas enfermedades, sino que es un momento en la vida laboral de una persona en la que ésta decide dejar de trabajar, después de muchos años haciéndolo. Esto incluso puede significar mayor tiempo libre para su disfrute.


-Menor capacidad de producción por lo que hay que jubilarlos.
La capacidad de producción no se reduce, pero hay que dejar paso a los jóvenes. Además en los trabajos de gran esfuerzo es cierto que la edad de jubilación es más baja. Ante esto hay que decir que los mayores ven deterioradas algunas de sus capacidades pero esto se compensa con la experiencia acumulada y con el hecho de que tienen muchos más recursos a la hora de trabajar.

-Suposición de encontrarse en una situación de decrepitud e inutilidad.
Se reducen las capacidades en algunos aspectos pero no son por ello inútiles. Culturalmente tenemos la tendencia a hacer inútiles a las personas mayores, y se les transmite la idea de lo que pueden hacer ya no es valioso. Ante esto tenemos que considerar que cualquier persona realiza acciones de valor y útiles y esta es la idea que debemos transmitir a los mayores para que no se reduzca su autoestima.


-No se les reconoce la posibilidad de realizar trabajos de arte, ciencia o académicos.
Esto es falso como muestran múltiples ejemplos de personas famosas que son mayores y que siguen produciendo. Algunos de estos ejemplos son: Pablo Picasso, José Saramago, Isabel Allende, Julio Iglesias… Con esto se observa que no por tener mayor edad la posibilidad de realizar arte o tareas académicas se reducen.


EPD 9: La figura del formador en el ámbito profesional.

Esta semana hemos realizado la última EPD de la asignatura: Educación de Personas Adultas y Mayores, en la que debíamos elaborar un resumen sobre el texto "La figura del Formador en el Ámbito Profesional" de Luis Amador Muñoz y Mª Carmen Monreal Gimeno.

El resumen de nuestro grupo fue el siguiente:

El formador debe estar preparado para todos aquellos cambios que se nos presentan en nuestra actual sociedad; tanto si estos proceden del mundo exterior como si provienen de nuestro propio mundo. Por ello, debemos tener en cuenta el marco general de su formación desde los diferentes puntos de vista o enfoques.

1. El formador en el mundo laboral.
El formador está especializado en determinados conocimientos y al mismo tiempo ser una especie de orientador.

Son varios los enfoques a partir de los que se puede observar la figura del formador:

-Enfoque técnico à educación entendida como igualdad de oportunidades siendo obligatoria y gratuita. Será responsabilidad de las instituciones y se centrará en los conocimientos que tiene el profesor y no el alumno. Planificación externa y fuera del control del profesorado.

-Enfoque de la solución de problemas à educación entendida como análisis de reflexión de la práctica. Es importante deliberar desde la información. El formador es un elemento externo que facilita el encuentro de la solución más viable.

-Enfoque cultural à se considera la educación como un proceso complejo determinado por valores y creencias culturales. El profesor interpreta desde su valor y creencia el proceso de formación.

-Enfoque sociocrítico à la educación es analizada desde el punto de vista del mundo social y se entiende como una interrelación entre prácticas, ideologías profesionales, intereses sociales y culturales. Para la solución de los problemas es fundamental la participación social.

2. La formación del formador.
El formador tiene una doble responsabilidad: promover la formación de los profesionales dedicados a ella y fomentar y potenciar su propia formación.

Pueden distinguirse diferentes enfoques que permiten hacer frente a la formación de los formadores: la tradicionalidad, la tecnología, el contextual y el contextual-crítico.

Existen cuatro bloques de formación:
-Contenidos culturales generales.
-Contenidos pedagógicos.
-Contenidos profesionales generales.
-Contenidos técnicos profesionales específicos.

2.1. Dificultades en la formación.
-Falta de tiempo.
-Indefinición del compromiso entre el formador y el grupo destinatario de la formación.
-Falta de incentivos.
-Aislamiento entre los formadores.

3. El formador: un animador educativo.
El formador debe potenciar la comunicación y estructurar la vida en el aula, coordinar al resto de formadores y generar una cohesión de grupo. El trabajo debe ser flexible permitiendo cambios en el proceso, existiendo relación entre los objetivos y contenidos.

Se fomentará la autonomía personal de los alumnos y se dará respuesta a sus expectativas.


EPD 8: En la ciudad sin límites.

En esta sesión práctica hemos visto una película que cuenta la historia de una familia, diseminada por la geografía por diversas cuestiones, que se reúnen en un hospital de París al estar tratando al padre de un cáncer. 

El padre además del cáncer también muestra signos de padecer alzheimer reflejados en una paranoica desconfianza de todos los que le rodean, afirmando que conspiran para acabar con él.

Toda la familia considera que el padre, debido a su edad y a su enfermedad ya no sabe lo que dice ni lo que hace, por ello, muestran una actitud compasiva y de protección pero no prestan atención a lo que el padre quiere en ningún momento, excepto el hijo pequeño.

Se muestra una imagen de una familia rica pero incomunicada. No hablan entre ellos de lo que sienten y el padre, al estar en una situación de decadencia, ha perdido para los miembros de la familia todo el prestigio que tenía con anterioridad.

En esta película podemos establecer dos rangos de personas: los adultos mayores donde encontramos a la madre y al padre y los adultos jóvenes donde estarían los tres hijos y las novias y/o esposas. 

En los adultos jóvenes se observa una trayectoria de vida basada en el trabajo y el esfuerzo, de hecho deben hacer turnos para cuidar del padre en el hospital a la vez que cumplen con su horario de trabajo. Solo destaca el hijo pequeño, el cual se fue a vivir a Argentina tras conocer a su novia y esta pareja si parece mostrar una comunicación fluida hasta que aparece el romance secreto de este hijo con la cuñada. 

Por otra parte, los adultos mayores son, por un lado, la madre, la cual sigue manteniendo los contactos sociales con personas externas a su familia e intenta cuidar a sus hijos y a su marido. Y por otro lado, el padre, que en el momento en el que enferma se ve sumido en una decadencia y una falta de comunicación, además de perder los vínculos sociales. Todo se encuadra dentro de una hipocresía y falta de emociones, en una familia que parece ocultar algo.

El padre dentro de esta familia es un elemento que genera tensión y discordia, puesto que ha provocado que todos se tengan que movilizar y estar pendientes de él debido a su enfermedad. La familia con respecto a esta situación se encarga de los cuidados empleando grandes cantidades de dinero en hospitales y tratamientos, pero no se observa un trato cercano entre miembros de la familia ni muestras de cariño o ternura con el padre.


El conflicto se genera cuando el padre enferma y hay una responsabilidad que cumplir con respecto a los cuidados. El padre, a las puertas de la muerte quiere reencontrar su pasado (un mundo feliz o al menos distinto), acogerlo, defenderse de los que imposibilitaron toda su existencia, destacando sobre todo a su mujer. Se observa así un deseo constante, por parte del padre, de recuperar su autonomía.

A lo largo de toda la película, el padre desea volver a revivir un momento de su pasado y para ello tiene una motivación intrínseca: satisfacción personal, una vez que ha arreglado un tema que él considera que tenía pendiente. De los miembros de la familia, solo el hijo menor intentará escuchar a su padre porque piensa que lo mínimo que puede hacer es atender las necesidades, intereses y motivaciones de su padre en ese momento de su vida.

En definitiva, esta película muestra otra perspectiva de las diferentes situaciones que puede vivir una persona adulta mayor durante su vida. Con esto, analizamos y comprendemos que no podemos encasillar a todos los adultos mayores dentro del mismo cajón, puesto que todos y cada uno de ellos tienen estilos de vida, trayectorias profesionales, familias, motivaciones e intereses diferentes.